Carla Simón y Óliver Laxe competirán por la Palma de Oro en un Festival de Cannes que encumbra al cine español
Será la segunda vez que hay dos españoles en la principal sección del certamen más prestigioso del mundo. Simón presenta su tercera película, 'Romería'. Laxe estrenará 'Sirat' La tarifa plana para ir a los cines en España cumple dos años: “No hay ninguna intención de pararla”
El cine español
llegará al Festival de Cannes en un momento pletórico. Hay que remontarse a 2009 para encontrar algo parecido, que dos películas españolas estén en la Sección Oficial en competición por la Palma de Oro. En aquella ocasión fueron Isabel Coixet y Pedro Almodóvar. Casi nada. 16 años más tarde
serán Carla Simón (con Romería) y Oliver Laxe (con Sirat) los que intenten llevarse el premio más prestigioso e importante del cine de autor. Un hito que pone e relevancia el estado de forma de nuestro cine. Estar en una selección que agrupa a las 20 mejores películas —de miles de las que se presentan— es algo casi imposible. Que dos filmes de un mismo país lo hagan en el mismo curso es una hazaña que hay que celebrar.
En el caso de Óliver Laxe su presencia se rumoreaba desde hace tiempo y es un salto natural en su filmografía. Laxe es un cineasta formado en Cannes y aupado por Cannes. Allí ha presentado todas y cada una de sus películas. Su debut, Todos sodes capitanes, estuvo en la Quincena de los Realizadores; su segunda obra, Mimosas, en La Semana de la Crítica, y O que arde, en Una cierta mirada —la segunda sección en importancia del festival— donde logró el segundo premio.
Por tanto, su siguiente paso era pisar, por primera vez, una Sección Oficial. Si a eso sumamos que cuenta con El Deseo —la productora de Pedro y Agustín Almodóvar— en la producción y a Sergi López como protagonista, su presencia parece hasta lógica. After es una producción de Movistar+, la primera que llega a un certamen de clase A, y cuanta la historia de un padre que busca, junto a su hijo, a una hija perdida. Para ello acudirá de rave en rave por Marruecos.
Más complicado lo tenía Carla Simón. Muchos apostaban por ella. Con Alcarràs ganó el Oso de Oro, pero para Cannes no siempre es suficiente. Su tercer filme, Romería —que se estrenará el 5 de septiembre—, no contaba con coproducción francesa, ni con grandes nombres en su reparto —aunque sí con la fotografía de Helene Louvert, una de las más prestigiosas del cine francés—, y sin embargo el comité de selección no ha dudado en que el talento de Simón, —uno de los más precoces del cine español reciente— merecía un lugar con este filme con el que cierra su trilogía familiar contando la historia de su familia paterna. Un viaje a Galicia con las drogas y el SIDA de los años 90 como telón de fondo.
También en Una Cierta Mirada —la segunda sección en importancia y donde presentará su debut en la dirección Scarlett Johansson— habrá un componente español. La ópera prima de Diego Céspedes, La misteriosa mirada del flamenco estará en Cannes y cuenta con la coproducción de Irusoin, compañía vasca detrás de las películas de los Moriarty como La trinchera infinita. A eso habrá que sumar lo que se anuncie la próxima semana en las secciones paralelas: Quincena de Realizadores y Semana de la Crítica. Todo para redondear un año que puede ser histórico para el cine español. De momento, en Sección Oficial a concurso cuenta con el mismo número de películas que el francés, algo inaudito.
Laxe y Simón se las verán en la pelea por la Palma de Oro con viejos conocidos de Cannes como Jafar Panahi —el director iraní que ha rodado en clandestinidad su nuevo filme—; los Hermanos Dardenne, poseedores de dos Palmas, que presentarán su nuevo filme, La maison maternelle; o Wes Anderson que estrenará The phoenician scheme. También de creaciones de Cannes, como Joaquin Trier, que tras La peor persona del mundo mostrará Sentiomental Value; y nuevas miradas que debutan en el certamen como la de Ari Aster, director de hereditary o Midsommar y que visitará La Croissette por primera vez con Eddington, protagonizada por Joaquin Phoenix.
El director del festival ha destacado el aumento de la presencia de directoras en la Sección Oficial. Son 6 de las 19 películas anunciadas —aunque siempre se anuncian unas cuantan más adelanta para cerrar la lista—, lo que supone un 32%. Además de Carla Simón se encuentran referentes como Kelly Reichardt, que ha llegado a tiempo con The mastermind (protagonizada por Josh O'Connor); o ganadoras de la Palma de Oro como Julia Ducournau, que estrenará su esperadísima nueva película tras Titane y de nombre Alpha.
A ellas —y a la espera de ver si se completa la sección con otros nombres que sonaban como Linne Ramsay— se unen tres sorpresas: la actriz Hafsia Herzi; la segunda película de Mascha Schilinski —que desde el mercado de la Berlinale ha sonado como la gran revelación del año; y la haponesa. Chia Hayakawa.
Josh O'Connor hará doblete en el festival, ya que también protagoniza otra de las películas más esperadas, The history of sound, de Olivier Hermanus, un musical queer que protagoniza junto a otro de los actores de moda, Paul Mescal. Será uno de los muchos rostros de Hollywood que se verán por Cannes. Muchos de ellos en pases fuera de concurso, como Tom Cruise que presentará la nueva entrega de Mission Impossible; o Jodie Foster, que protagoniza el filme francés Vie Privee que dirige Rebecca Zlotowski.
Una confirmación de última hora
Pocos minutos después de conocerse la noticia, Carla Simón atendía a la prensa. Lo hacía junto a su productora, María Zamora. Ambas estaban emocionadas, y compartían algunos de los entresijos de esta selección que, no lo ocultan, era “un objetivo”, pero uno que sabían que era muy complicado. De hecho, hasta que no han escuchado el nombre de Carla pronunciado por Thierry Fremaux no se lo han creído del todo.
La confirmación de su presencia en Sección Oficial llegó a última hora. “Anoche a las 22:30”, cuenta Carla Simón que añade que, obviamente, han dormido poco. El proceso lo definen como intenso, entre otras cosas porque han llegado “muy in extremis con el montaje”. Destacan la importancia de “los agentes de venta y los distribuidores franceses”, que tienen experiencia en estas gestiones.
Mientras tanto iban escuchando rumores y noticias de otros compañeros que sí estaban dentro y la ansiedad aumentaba. “Escuchas a otros que les están diciendo que no, y de repente dices, hostia esto se va haciendo más posible, pero van pasandi las horas y las horas”, recuerda María Zamora del día de ayer.
Cuentan, entre la broma y la fábula, que tuvieron una señal. “Estábamos compartiendo esto juntas, cenando, y a mi hijo le gusta mucho El carnaval de los animales, que es música clásica. Y entonces la puse y María me miró como si me hubiera vuelto loca. Yo le dije que por qué y ella me dijo que es que esa era la música que ponen antes de las películas en Cannes, cuando sale la escalera. Así que para mí fue una señal un par de horas antes de que nos llamaran. Es una tonrería, peroi para nosotras es la confirmación de que las señales existen”, cuenta Carla Simón.
Una ilusión que, además, es compartida. La presencia de Óliver Laxe es, para la directora, “una noticia muy buena para nuestro cine y la señal de que están pasando cosas”. “Me algro muchísimo de poder compartir esto con él y sentir que no son casos aislados”, subraya.